La tortilla de patatas es uno de los emblemas de la gastronomía española. Pero, ¿por qué este plato tan característico se llama «tortilla»? El término parece tener orígenes mucho más antiguos de lo que podríamos imaginar, y su significado ha evolucionado a lo largo de los siglos. Te lo contamos a continuación.
Según la RAE, la definición de tortilla es la siguiente: «alimento preparado con huevo batido, cuajado con aceite en la sartén y de forma redonda o alargada, al que a veces se añaden otros ingredientes». Cuando esos ingredientes de los que habla la definición son patatas, pasa a denominarse tortilla de patatas o tortilla española.
Aunque hoy en día la palabra «tortilla» se asocia principalmente con esta versión (a menudo ni siquiera añadimos «de patatas»), originalmente se refería a una torta más simple, hecha de harina o pan. Según los lingüistas, «torta» proviene del griego artos (pan) y de su contracción to artidion (panecillo). De ahí, «tortilla» se traduce como «pequeña torta» o «pan delgado en forma circular».
Es por eso que, cuando los conquistadores llegaron a América y descubrieron que las civilizaciones precolombinas preparaban una especie de torta plana hecha de maíz, vieron una similitud en forma y tamaño con las tortas pequeñas que conocían en Europa y decidieron llamarlas también «tortillas». Hoy en día, las tortillas de maíz son un pilar fundamental de la gastronomía mexicana, utilizadas para preparar platos como tacos, enchiladas y quesadillas.
Con el tiempo, el término «tortilla» se amplió a otros tipos de masas, como las preparadas con huevos. Así, cuando aproximadamente en el siglo XIX nació la mezcla de huevos batidos y patatas fritas cuajada en sartén, se le dio el nombre de tortilla de patatas, en continuidad con la tradición de denominar «tortilla» a las preparaciones planas y redondas.
¿Y la tortilla francesa qué?
Aunque suene raro, la tortilla francesa también tiene su origen en España, tanto la receta como su denominación. Este plato, que consiste únicamente en huevos batidos cuajados en sartén sin ningún otro ingrediente, surgió durante la Guerra de la Independencia Española. Debido a la escasez de alimentos provocada por el conflicto con Francia, los cocineros españoles tuvieron que prescindir de las patatas creando esta versión más sencilla de la tortilla.