¿No paras de ver en Instagram imágenes de objetos ordenados según su patrón de colores?  Aunque no se trata de una práctica nueva, un programa de televisión ha popularizado esta forma de ordenar armarios, estanterías y frigoríficos. Se le llama técnica del arcoíris y, además de resultar muy estética, permite encontrar todo más fácilmente.

Ropa
Sin lugar a dudas la mejor manera de ordenar un armario es por colores, del tono más claro al más oscuro. La técnica del arcoíris proporciona un mayor contraste entre las prendas, lo que hará que puedas seleccionar la deseada más rápidamente.
*Antes de comenzar con esta clasificación recomendamos deshacerse de las prendas innecesarias y que no se usen.

Zapatos
Si tienes la suerte de contar con una estantería para guardar zapatos, estos quedarán preciosos ordenados por tamaño y color. Si no es así, lo mejor es guardarlos en cajas. Para no salirse de la “técnica del arcoíris”, puedes pintar las cajas o simplemente ponerles una pegatina encima del color del zapato. Es importante que todos las cajas tengan el mismo tamaño.

Librería
quizá  es cierto que en este caso la técnica del arcoírisis prioriza la estética a la practicidad. Pero es que el impacto visual resulta insuperable. La ventaja de ordenar tu librería según la técnica del arcoíris es que permite aprovechar toda la belleza y valor decorativo de tus libros. Queda tan bonita una librería ordenada por los colores del arcoíris que hasta hay un hashtag que lo corrobora: #rainbowshelves

Frigorífico
Aunque tener el frigorífico ordenado no es tarea sencilla, merece la pena invertir tiempo en ello.  Un frigorífico desorganizado puede llevarnos a olvidar alimentos a o que no tengamos fácil acceso a ellos. Por eso, si los ordenamos según la técnica del arcoíris, ganaremos en comodidad y seremos más sostenibles. Podemos ayudarnos con cajas transparentes e introducir en ellas los alimentos de un mismo tono cromático.

Juguetes
Durante las primeras etapa de su vida es importante que los niños aprendan a hacer cosas por sí mismos y a experimentar. Aprender a ordenar su cuarto y sus juguetes es una de esas actividades que, sin lugar a dudas,  le ayudarán en su crecimiento. La técnica del arcoíris les resulta especialmente fácil de comprender y, mucho más, divertida.