El debate sobre incluir cebolla en la tortilla o no es uno de los más ardientes de nuestro país. Nunca se llega a una conclusión porque ambos bandos tienen sus razones. El mes pasado repasamos los argumentos de los concebollistas y este mes toca saber qué opinan los sincebollistas. Échales un vistazo por si necesitas algún día defender tu posición.
*Por cierto, nosotros no nos mojamos. Somos de las dos y, por eso, ofrecemos las dos variedades: Tortilla Receta Casera Palacios con cebolla y Tortilla Receta Casera Palacios sin cebolla.
SE LLAMA TORTILLA DE PATATAS
No es raro que los amantes de la tortilla sin cebolla defiendan su posición alegando razones etimológicas. Según ellos, la tortilla de patatas debe ser sin cebolla porque si no tendría que llamarse “tortilla de patatas y cebolla”. Quizá no sea el argumento más contundente, pero ahí está.
LA TORTILLA ORIGINAL NO LLEVABA CEBOLLA
La primera receta de tortilla de patata documentada data del año 1798 y, efectivamente, no incluía cebolla por ningún lado. Aunque siendo justos esa primera receta ni siquiera llevaba patata como tal. Según el libro ‘Historia de la tortilla de patatas. Su origen: Villanueva de la Serena 1798’ de Ana Cordero, la receta primigenia se elaboró con harina de patata y al horno.
LA DE BETANZOS TAMPOCO LLEVA CEBOLLA
No es la original, pero sí la más famosa. La localidad coruñesa de Betanzos es conocida por ofrecer las mejores tortillas de España. El secreto es una receta que pasa de generación en generación y que, como podéis imaginar, no lleva cebolla. Curiosamente la tortilla de Betanzos destaca por ser extremadamente jugosa, uno de los principales argumentos de los defensores de la tortilla con cebolla.
APORTA UN DULZOR ¿INNECESARIO?
Este argumento cuenta con una voz de prestigio a su favor: el mediático cocinero madrileño Dabiz Muñoz. Según el chef, la cebolla aporta un excesivo e innecesario dulzor que no casa con el resto de los ingredientes de la tortilla. Sin embargo, lo que para Dabiz Munoz es un error, para otros es un punto a favor. En este caso, todo depende de los gustos de cada uno.
ES MÁS FÁCIL DE COCINAR
Aquí sí que no hay duda de que cocinar la tortilla sin cebolla es mucho más cómodo, sobre todo si quieres evitar el típico lagrimeo que se produce durante el corte de la hortaliza. Igualmente, la cebolla es el ingrediente que más fácilmente puede arruinar tu tortilla, ya que si se quema o se queda cruda destrozará por completo el sabor. Eliminándola de la receta, evitas este problema.
ASÍ LA HACÍAN EN MI CASA
Este argumento que valía para los defensores de la tortilla con cebolla, también sirve para los defensores de la tortilla sin ella. En nuestra opinión, la mejor tortilla, sin duda, es la que hacían en casa de cada uno cuando era pequeño. Si en tu casa la hacían sin cebolla, entonces la mejor tortilla irremediablemente es la que no lleva cebolla.